BANZER, NI OLVIDO NI PERDÓN
El 21 de agosto de 1971 se consumaba un golpe militar fraguado y financiado
por el imperialismo yanqui a través de su embajada en Bolivia, pertrechado por
los militares gorilas de Brasil y Argentina y ejecutado por un puñado de militares
que mal usaron su institución en beneficio de intereses extranjeros y por fascistas
del MNR y FSB que no dudaron en disparar al pueblo inerme que salió a defender
al gobierno popular del presidente Juan José Torres Gonzáles. El artero
cuartelazo costó la vida a miles de bolivianos, no sólo en las acciones militares
de ese día, sino a causa de la persecución, el uso de la tortura y la desaparición
de combatientes populares víctimas de la Operación Cóndor, de la que
participara Hugo Banzer junto a sanguinarios dictadores como Augusto Pinochet
y Jorge Videla, entre otros dictadores adiestrados en las escuelas
norteamericanas especializadas en el asesinato y represión a sus propios
compatriotas.
Fue el inicio de la entrega de nuestras riquezas a la voracidad de las empresas
extranjeras; de la conculcación de las libertades democráticas; de la clausura de
las universidades y escuelas; de la represión y matanza de humildes campesinos
en Tolata y otras regiones del país; de la persecución a la Iglesia Católica y a
sus sacerdotes identificados con los más humildes; de la negra noche del
fascismo en Bolivia, con su cortejo fúnebre de miles de asesinados.
El Movimiento Guevarista de Bolivia rinde hoy homenaje a quienes no
claudicaron ni arriaron sus banderas de Liberación Nacional y Socialismo,
entregando generosamente sus vidas por la causa de los pobres, los obreros, de
los estudiantes, de los campesinos e indígenas de nuestro país. Inútil ha sido el
accionar de exterminio de aquella dictadura; el pueblo supo y sabe levantarse de
sus derrotas, con más fuerza y convicción que nunca, incansable en su lucha por
la Segunda y Definitiva Independencia. En la lucha actual por la recuperación de
la democracia, continuamos la marcha inspirados en esos ejemplos de heroísmo
y amor a la patria, con la firme convicción de victoria.
¡Banzer, ni olvido ni perdón!
¡Hoy, como ayer, el pueblo vencerá!
¡Patria o Muerte! ¡Venceremos!