ACCIONES ESTRATEGICAS
Si no somos capaces de asimilar nuestras experiencias, mucho menos vamos a utilizar la experiencia de las luchas de los desposeídos del mundo, en los miles de años, en los que se ha arrancado grandes derechos, e incluso, en algunos lugares del mundo, hoy se está viviendo la posibilidad de construir el mundo nuevo.
En el principio, cuando aparece la propiedad privada, los pobres no teníamos ni siquiera el derecho a nuestras vidas que eran, junto a los medios de producción, parte de esa propiedad. Siempre hemos estado en desventaja, los esclavistas, los señores feudales y hoy las burguesías nacionales ligadas al imperialismo tienen los mejores recursos en sus manos.
En el siglo pasado, los oprimidos en varias partes del mundo, desplazaron del poder político a las clases dominantes y desarrollaron revoluciones con sus características propias. Las revoluciones Rusa, China y Cubana, aparte de los logros obtenidos en los campos económico, político y social, quedan como ejemplos de que es posible avanzar en el proceso del desarrollo histórico.
El pueblo boliviano, al igual que otros pueblos de Asia, África y América Latina, abrió espacios históricos importantes que se truncaron por la intromisión del imperialismo y por las debilidades de esos momentos, cuando ni los trabajadores ni los indígenas campesinos teníamos el instrumento político para tomar el poder. Busch y Villarroel ofrendaron sus vidas por pretender obligar a los barones del estaño que depositen en el Banco Central, las divisas de la venta de los minerales. La revolución del 52 fue traicionada por el MNR, que asumió la Nacionalización de las Minas y la Reforma Agraria, porque el pueblo tenía las armas y no había fuerzas armadas. El gral. Juan José Tórrez fue asesinado por la CIA en la Argentina, durante la dictadura de Bánzer, por haber nacionalizado Mina Matilde, por romper el contrato con la International Mineral Prosesing Company (IMPC) para tratar las colas y desmontes de Catavi, por haber expulsado al Cuerpo de Paz y finalmente, el imperialismo digitó a sus agentes internos, hasta consumar el golpe de noviembre de 2019, porque el gobierno de Evo Morales nacionalizó los hidrocarburos, se liberó de la dependencia del FMI y del Banco Mundial y desplazó a sus sirvientes de la administración del Estado Plurinacional y no parará en sus afanes de destruir los gérmenes de Libertad y Soberanía que crecen en las conciencias de los pobres y oprimidos de Bolivia.
Estamos pasando otro momento de tensión, magnificado por la derecha, cuando nosotros mismos entramos al afán de buscar contradicciones dentro del gobierno, de las organizaciones sociales y en el IPSP – MAS.
Lo que unos días antes, “hasta en la militancia de base se habla, a veces en las voces de algunos oportunistas que piensan que levantando el nombre de Evo o David, van a conseguir algún beneficio personal. . .” quedó en nada, claro, ya no hay la posible vacancia de cargos ministeriales. Llegó el aniversario del Estado Plurinacional, Lucho y David aparecieron juntos desde un principio, en los discursos no hubo ninguna señal de discrepancia y finalmente el gabinete sigue intacto.
Pero sigue el vacío del programa estratégico y las acciones tácticas, coyunturales, de acuerdo a nuestra realidad, que deben guiar al gobierno, junto a las organizaciones sociales, para generar los recursos con los que se avance en la construcción de la nueva Bolivia.
¿En qué tiempo, la minería debe generar excedentes para que el Estado utilice en la diversificación económica? ¿En qué tiempo podemos alcanzar la soberanía y la seguridad alimentarias? ¿Hasta cuándo la minería estatal será el 7 % de la minería nacional y la minería privada seguirá explotando el 93 %, sin que el pueblo boliviano disfrute de esa riqueza no renovable?
Creo y tengo la esperanza que del seno del pueblo boliviano, puede salir el programa, hasta Evo lo ha solicitado. Y ese programa tiene que ser difundido, compartido, discutido, apropiado en las bases de las Organizaciones Sociales, ese programa será impuesto al gobierno y en ese momento se habrán generado nuevos liderazgos, no por pegas, sino por la marcha del Proceso de Cambio.
Por Guillermo Dalence