BOMBA NUCLEAR ELECTORAL
Los instrumentos del fraude derechista:
Los golpistas de toda laya, tienen como único “programa” impedir que el MAS vuelva al gobierno. Esta obsesión no sería preocupante, pero bajo la batuta del imperialismo están ejecutando una estrategia para “conservar” el poder, que lograron arrebatar después del golpe de Estado. Igual que en Honduras, después del golpe viene el fraude electoral, que según los estrategas del norte se denomina “bomba nuclear electoral”
Uno de los instrumentos de la “bomba” son las “encuestas”. Hay que subrayar, las encuestas son herramientas del fraude electoral:
- Las encuestadoras no pertenecen a las “Carmelitas descalzas”, todas cobran bastante dinero. Obviamente, responden a las exigencias, solicitudes y pedidos de quienes les pagan. Después, publican encuestas al sabor de sus clientes de turno: los partidos políticos de la derecha, financiados por el imperialismo y/o fuentes dudosas.
- Con la complicidad de los medios de comunicación el siguiente paso es ganar e inducir el voto para las opciones “útiles” de la derecha (voto útil). Es un medio subliminal y despolitizado para dirigir el voto.
- Mientras tanto, los medios de comunicación se encargan de criminalizar, desprestigiar y calumniar a los representantes del MAS, siguiendo la premisa del nuevo Plan Cóndor: eliminar el honor de los contrincantes.
- Para consumar el fraude existe un lema, el voto no importa, sino el que cuenta. Y la derecha tiene el control del Órgano Electoral, encargada de contar los votos, con un Presidente, Salvador Romero, que fue nombrada por Añez y con referencias de ser un dependiente de la CIA. ´
Las últimas encuestas difundidas otorgan el primer lugar al MAS, y después reparten cifras inferiores a Mesa, Añez y Camacho. Por lo que se sabe, estas cifras de las encuestadoras están adulteradas y corrompidas para “fijar una idea” en nuestras mentes: “Que el MAS gana, pero no alcanza” porque en la segunda vuelta gana un candidato de la derecha (garantizado con fraude). Por ello, la pelea por el segundo lugar se ha vuelto más importante que ser el primero, para ganar las elecciones en Bolivia no hay que ser primero, hay que ser segundo.
¿Cuál es la trampa? Que en las encuestas reales la tendencia en favor del MAS es abrumadora, hay quienes sostienen que supera el 50% (encuestas ECM-FSB). No se publica las cifras reales, mientras se disminuye las cifras al MAS, se aumenta porcentajes a las otras opciones y así el fraude es invisibilizado.
Por otro lado, “las encuestas nacionales” no toman en cuenta la intención de voto de las comunidades originarias campesinas, ese voto que ya la negaron en octubre de 2019.
De ese modo, la derecha controla la fuente de la información (las encuestadoras), las fuentes de difusión (los medios de comunicación y las redes) y quien producirá el fraude con el conteo de los votos (Órgano Electoral). Todos ellos, instrumentos del fraude.
El autoengaño es parálisis. Los del MAS, harían bien en organizar la defensa del voto popular, que significa control en cada una de las mesas y seguimiento del escrutinio mesa por mesa.
¡ALTO AL MEGA FRAUDE DE LA DERECHA!!!